jueves, 12 de agosto de 2010

DIARIO DE UNA CAMINATA 4

DIARIO DE UNA CAMINATA (CUARTA PARTE)
El día dos de la caminata…….
Desperté a las 5.30 de la mañana (media hora más de sueño fue maravillosa), ese día Daniel nuevamente se despertó para llevarme a la “Wellness Village” que era el campamento donde habían dormido el 80% de las participantes de la caminata y donde iniciaría la caminata del segundo día. Mucha gente me ha preguntado el por qué yo me quedé en hotel y no en el campamento… como ya hemos aclarado, yo no soy muy deportista, y eso de los campamentos… los hacía de niña cuando estaba en las Guías de México, pero de eso hace muuuucho tiempo, y si además de caminar 42 kilómetros iba a dormir mal y mal bañarme y….. no, no, no, no era buena idea, así que mejor en el hotel y con ánimo para caminar el segundo día.
Llegamos alrededor de las 7 de la mañana al campamento y me despedí de Daniel, llegué y desayuné (solo avena y fruta, porque esto de huevos revueltos y salchicha no era lo mío) y a las 7.30 de la mañana dio inicio el segundo día de caminata, algo que me llamó la atención es que yo ya estaba en el inicio de la caminata y varias de las caminadoras apenas estaban en la fila del desayuno, es decir, había gente que se lo tomaba con más calma que yo.
El inicio estuvo bastante cansado, porque empezó en un parque lleno de colinas, así que de inicio caminamos colinas que no eran necesarias. Y el segundo día fue en pleno San Francisco, esto significa colinas con largas subidas y cansadas bajadas, nunca pensé que las bajadas fueran peores que las subidas, suena medio irónico, sin embargo las bajadas muy empinadas hacían que yo tuviera que tener más cuidado que lo normal con las rodillas y que mis deditos pegaran constantemente contra la punta del tenis (de ahí lo morado de mi uña del pie izquierdo).
Algo importante de esta caminata es que por el número de participantes (alrededor de 3,000) y el tiempo que se toma (casi 12 horas el primer día y 7 horas el segundo día) no se cierran las calles, a diferencia del maratón donde corren 20,000 personas y lo hacen en máximo 8 horas todo. Al no cerrarse las calles hay que ir por las banquetas, y mucha gente se nos quedaba viendo sin saber cuál era nuestro asunto, hubo quien me preguntó si éramos un tour (porque veía mujeres con gorras o playeras rosas), o los turistas nos tomaban fotos sin saber para qué.
Y qué decir de los semáforos, como no se cierran las calles hay que detenerse en los semáforos, pero de pronto nos tocaba uno tras otro, y bueno, lo mejor que yo podía hacer en ese momento era estirarme, para no entumirme, claro, como íbamos vestidas de deportistas no se ve mal que te empieces a estirar, es como parte del atuendo, pero ya vestida de civil creo que no se vería tan bien jejejeje, tuve que entender que si llegaba a la boca-calle con el semáforo, y al momento de cambiar a verde cruzaba la calle y caminaba hasta la siguiente cuadra, el tiempo que me llevaba llegar a la siguiente boca-calle era exactamente el tiempo que duraba el semáforo en verde, así que llegaba justo al momento en que nuevamente se ponía en rojo, por lo que tuve que acelerarme para pasar el verde a punto del rojo y el tiempo del rojo fuera el que hacía yo en recorrer esa cuadra y me fuera prácticamente en verde (como carro sincronizado con los semáforos en verde jejejeje).
Caminamos por la zona hispana de San Francisco y luego la zona hippie (la zona gay la habían recorrido el día anterior), pasamos enfrente del City Hall justo antes de que empezara la final del mundial, y vimos las pantallas que habían puesto y a los fanáticos de España y de Holanda correr a ver el partido. Recorrimos casi toda la calle Market, desde la zona de vagabundos hasta la zona de los malls y tranvías turísticos, llegamos al embarcadero (Pier) 1 y de ahí caminamos hasta llegar al famoso Pier 39.
Como yo iba en el primer 12% de las caminantes, al llegar a las paradas era fabuloso porque no había colas para ir al baño (y eso créanme, era fabuloso). Al principio de la caminata me volví a encontrar con el grupo del día anterior que traía música, maravilloso para el inicio, sin embargo dos de ellas ya venían muy cansadas y venían a un paso mucho más lento al que yo iba, así que cuando llegamos al lunch (que fue como a las 10.30 de la mañana) ellas decidieron sentarse a comer y yo seguí caminando, porque yo sabía que si me sentaba me iba a entumir y no iba a terminar.
Después me uní a un grupo en las que iban una señora como de 60 años, sobreviviente de cáncer de seno y caminadora desde hace 10 años y sus 3 hijas, no tan caminadoras ni tan animadas como la mamá, pero caminando con ella con gusto. Este grupo iban vestidas de porristas y conocían muy bien San Francisco, con ellas seguí hasta el final.
Con todo y los semáforos y las colinas hice solo 20 minutos más el domingo de las 5 horas que hice el sábado, llegando 10 minutos antes de la 1 de la tarde, subí la última colina agotada pero muy emocionada, y llegué a la meta final donde había mucha gente vitoreando y tomando fotos.
Al llegar vi a Daniel y después de las felicitaciones y los abrazos pasamos a la enfermería solo por la crema que es como para golpes para ponérmela en los pies y que no se me hincharan y nos sentamos a esperar a que llegaran los últimos y en esa espera sacamos la computadora y usando el teléfono de Daniel como modem vimos los dos tiempos extras del mundial, con todo y el gol!!! Asi que pude hacer la caminata y ver el gol, no me lo perdí jejejeje.
A las 2.45 de la tarde llegó la última persona de la caminata, claro que hubo más de una que llegaba cargada y a varias se las llevaron en ambulancia. A las 3 de la tarde dio inicio la ceremonia de clausura y pasaron todos los sobrevivientes que habían caminado y después el resto de los caminantes, se dieron los donativos a las diferentes instituciones de San Francisco, hubo un discurso muy emotivo y se dio por clausurada la caminata.
Fuimos saliendo, emocionados y cansados, a seguir con nuestras vidas, sabiendo que habíamos cumplido una meta….
El cumplir 40 lleva a mucha reflexión, más de la que me gustaría de hecho!!!, pero una de las cosas que noté últimamente es la similitud que tengo entre esta caminata y mi llegada a esta edad…. Si estuviera corriendo un maratón y tuviera que llegar en primer lugar o segundo o tercero no tendría tiempo de detenerme, tendría el riesgo de tener rozaduras por la ropa que uso, me lastimaría los pies…. Sin embargo al decidir caminar como lo hice, me doy cuenta que finalmente entendí la vida, al caminar llevo mi paso, llevo mi ritmo, no voy más rápido que los demás, es más, más de uno puede pensar que más bien soy lentona, lenta para arrancar y camino despacio, eso no significa que no llegue, solo que llegaré a mi ritmo, al ritmo de los que han estado en otras circunstancias y decidieron caminar por llegar, no por competir. Al tiempo que camino voy viendo como me siento, llevo la botella de agua en la mano para hacer ejercicio y entretenerme con algo, si siento que me duele la rodilla o estoy pisando mal, me tomo el tiempo para corregirlo (mientras sigo caminando), y eso me lleva a no sentirme mal, a disfrutar de la caminata, a decir –claro que lo voy a lograr, ¿por qué no?- y es que eso es la vida, caminar, componer el paso y cambiar el rumbo y seguir caminando, saludar a unos y a otros, hacer amigos y luego tomar caminos distintos, caminar disfrutando el camino, sabiendo que voy a llegar a la meta por mi, por el gusto de hacerlo, por el gusto de vivir a mi ritmo, y sabiendo que ese es mi ritmo, el de la floja-no-deportista que un día decidió que ya era momento de un reto mayor.
Gracias a todos los que colaboraron en esta caminata, con sus donaciones, con sus mails de aliento, con su apoyo, y gracias a todos los que han colaborado en mi caminata de vida, muchos llevamos un buen rato juntos, de pronto uno se adelanta y al rato lo alcanzamos o nos separamos y al rato nos volvemos a ver, pero seguimos ahí… GRACIAS A TODOS POR SER PARTE DE MI VIDA.
Tais

DIARIO DE UNA CAMINATA 3

DIARIO DE UNA CAMINATA (TERCERA PARTE)
Es interesante ver la reacción de las personas a mi participación en esta caminata….
Cuando alguien nos dice que es maratonista o ciclista o que decir de los triatlonistas o ironman tan de moda, los no deportistas como yo los vemos y decimos wow, que padre lograr eso, sabiendo que nosotros quizás no lo lograriamos, que no tenemos la constitución, la disciplina, las ganas ni la entrega para hacerlo, o simplemente que no nos interesa. Nos impresiona gratamente que alguien sea capaz de correr un maratón en 2.20 horas o de hacer un maratón mas x kilómetros en bicicleta más x kilómetros nadando, inclusive teniendo casi 60 años y llevando a su hijo parapléjico con él (como un video que me llegó por e.mail de un señor australiano). Algunos se atreven a hacer ese tipo de hazañas y muchos los admiramos por ello.
En mi caso no es así, yo no soy de grandes esfuerzos, podría decir que no lo hacia porque se me bajaba la presión y me desmayaba pero ese era un gran pretexto, sería mejor que no me gustaba o que no me motivaba o que simplemente soy floja. Y mucha gente lo sabe, sabe que no soy de grandes esfuerzos físicos, así que el hecho de haberme propuesto hacer una caminata y que esté la posibilidad de lograrlo hace que muchos de los flojos-no-deportistas como yo se sientan identificados, ya me han preguntado cuándo es esta caminata y si hay otras iguales, ¿interesante no?
Y finalmente llegué a San Francisco…. Claro, llegar no fue tan fácil porque tuve que hacer una maleta de “por si”… por si llueve, por si hace frio, por si hace calor, por si…. Porque no sabía qué podía suceder en la caminata.
Primero que nada debo darle las gracias a mi primo Daniel (gracias Daniel una vez más) porque voló de Los Angeles a San Francisco para estar conmigo y apoyarme el fin de semana, y fue un apoyo maravilloso. Lo menciono además de darle las gracias para que sepan de quien hablo en mi relato de la caminata.
El viernes empezó todo, llegué a registrarme y bueno, desde la entrada todo era ROSA!!!, digo, totalmente anti-testosterona, lo cual no estoy segura que sea lo mejor en cuanto a publicidad y manejo de mercado, porque muchos hombres se deben sentir excluidos o no se sienten parte del grupo cuando todo el mundo es parte de grupos de ayuda y más contra el cáncer.
Me registré y bueno, como buena mujer tuve que pasar por el “shopping” las camisetas de “Avon Walk” y la gorra y los tennis y bueno, todo lo que se me pudo ocurrir con eso de que estaba rebajado y además era por una buena causa….. ya sé, pretextos pretextos jejejeje.
Salimos cargados de bolsas y yo cada momento más nerviosa, ¿y si no podía? ¿Y si me agotaba? ¿Y si….? Todos los ysis que se me pudieron ocurrir, adonde Daniel me ayudó a irme tranquilizando.
Fuimos a cenar comida tailandesa, era pollo y noodles y esperaba que me cayera bien, la verdad es que me moría del antojo y bueno, dicen que es bueno comer pasta y yo supuse que los noodles iban de la mano.
Cuando decidí ir a San Francisco la verdad es que lo decidí por la fecha más que por otra razón, sin embargo ya allá descubrí una ventaja que no había considerado, San Francisco está en el siguiente meridiano, es decir, que tiene dos horas de diferencia con respecto a Coatzacoalcos, y aunque parezca una trivialidad fue maravilloso, porque a las 10 de la noche para mí eran las 12, y a las 5 de la mañana del sábado que me tenía que levantar, para mí eran las 7, y para alguien nocturno como yo, dos horas a esa hora de la madrugada son muchas horas. Claro, para Daniel sí eran las 5 de la mañana, sin embargo se despertó para llevarme al punto de encuentro (les digo que fue maravilloso como apoyo y no me creen)
Salimos del hotel para ir por el carro al estacionamiento y encontramos un charter del cual nadie sabía, y bueno, decidimos que mejor me fuera en el charter (o shuttle) para no perder tiempo en buscar donde era. Llegué a las 6.15 de la mañana y empecé a ver a las personas que estaban a mi alrededor. La mayoría eran mujeres, y habían muchos equipos, ya sea caminando en honor a alguien o con alguien, habían las vestidas de piratas, las de porristas, las que tenían alas de mariposa y las que traían un tipo halo de ángel.
Como era contra el cáncer de seno había equipos con nombres fabulosos, como “BoobsBosters” y “Dudes for Boobs”, había uno muy simpático que se llamaba “Save second base” y me costó un ratito entenderlo…. Si todavía no lo entienden pregúntenle a un adolescente cuando dicen llegaste a primera base con la chava? A segunda base? Recuerdan qué era segunda base?..... exaaaactoooo.
A las 6.30 de la mañana empezó la ceremonia de inauguración, la cual fue muy emotiva y motivante, y a las 7 en punto, ¡Dio inicio la caminata!!
Ya para entonces yo, que hablo con las paredes, había entablado conversación con una chava que iba sola igual que yo, así que decidimos empezar juntas, y me gustó porque traía buen ritmo, asi que arrancamos.
Ya me había preguntado como íbamos a pasar el “Golden Gate Bridge” si no íbamos a pasar por la Freeway, pues de la forma en que van todos los peatones y ciclistas….. por la terracería a un lado, y ese tramo era como de 2.6 millas, de terracería, no la mejor forma de iniciar una caminata de varios kilómetros, porque claro, ¿Cómo sube uno al puente? Ahí empezaron las colinas de San Francisco, subimos escaleras y terracería hasta llegar al puente, claro, pasar el Golden Gate Bridge a pie es maravilloso, por supuesto se supone que la vista iba a ser espectacular, si solo la niebla nos hubiera dejado…. Pero en fin, eso es San Francisco, colinas y niebla….
Llegamos a Sausalito y seguimos caminando, el clima estaba fabuloso, porque estaba fresco y nublado, lo que ayudaba para no estar muy asoleadas.
Al llegar a la milla 5.2 (o sea el kilómetro 8) habían cosas de comer (plátanos y naranjas y todo tipo de barras, las de granola que me gustan), y baños, y como había decidido no entrar en la primera parada, decidía hacerlo en la segunda, claro, la fila estaba larguísima, pero como todavía no estaba muy caliente pude estar parada un rato mientras me estiraba (me ayudó mucho).
Salí de ahí y ya había perdido a la chava con la que iba (en esta caminata no importaba dejar de estar con alguien, puesto que cada quien lleva su ritmo), así que seguí caminando, ahí me encontré con otra señora que era viuda, jubilada de electricista y yo la veía y no se me ocurría como le iba a hacer para terminar, porque iba por las 39 millas (26 millas o sea 42 kms el sábado y 13 millas o sea 21 kms el domingo), y apenas íbamos en la sexta milla y yo ya la veía agotada.
Mientras caminábamos había voluntarios que pasaban en carros arreglados echándonos porras y dándonos cosas de comer (desde fresas deliciosas hasta snickers y m&m’s), eso de que caminar adelgaza no necesariamente es cierto con tanta comida a nuestro alcance jejejeje.
Mientras caminaba Daniel me veía en diferentes puntos a lo largo del camino, y me echaba porras y me daba muchísimo apoyo, y la verdad ayuda mucho eso de las porras.
Era fabuloso ver a las mujeres que caminaban, porque como iba a ser una caminata de largo alcance, no es como en el maratón que no traes nada encima, aquí al contrario, traían mochilas y botellas de agua, y era chistoso ver a algunas que se paraban en el cafecito a desayunar o a comerse un helado.
Me encontré al final de esta jornada un equipo de mujeres super padre, porque no puedes llevar ipod ni celulares, pero una de ellas llevaba música en la parte de atrás de la mochila, con una bocina, y bueno, íbamos a un ritmo parecido y con música ochentera… muy agradable.
Llegué a la milla 13.1 (kilómetro 21) del primer día muy bien, no iba agotada ni nada por el estilo, de hecho una de las del grupo me dijo que porqué no le seguía para tratar de lograr los 42 kilómetros ese día y los 21 al día siguiente, que siguiera hasta que ya no pudiera más, y yo le dije que no, que yo sabía que podía con los 21 el sábado y los 21 el domingo, pero si seguía hasta no poder más ese día, al día siguiente no iba a poder caminar.
Llegamos a la parada final para las que íbamos a hacer la mitad, era justo antes de volver a pasar el Golden Gate Bridge, y ahí tomamos un camión que nos llevó al punto de reunión.
Al llegar allá fue muy agradable que habían personas dando masajes en forma voluntaria, entonces me di un masaje, me puse crema de esta que es para los golpes y me tomé un flanax, y estaba lista para el día siguiente.
Esa noche fui a cenar comida de la India, deliciosa, para los que insistían en que comiera pasta, era más fuerte mi antojo de comida diferente que la necesidad de mi cuerpo de pasta jejejeje.
Fue un buen día, y me fui a dormir temprano para aguantar al día siguiente.
Saludos a todos, gracias nuevamente por su apoyo y sus donativos que hicieron todo esto posible y no se pierdan la conclusión de esta maravillosa caminata.

DIARO DE UNA CAMINATA 2

DIARIO DE UNA CAMINATA (SEGUNDA PARTE)
Pues ya estoy en la solicitud de donativos y con grandes y maravillosos resultados, así que fabuloso, ya veo que si voy a poder ir, asi que compro mi boleto de avión y ahora sí, a entrenarme……
Siempre he hecho un poco de ejercicio, baile, yoga, pilates, y me encanta hacerlo, y caminaba de vez en cuando, entre media hora y una hora, la mayoría de las veces con mi perrita para que nos entretuviéramos las dos.
Pero bueno, había que empezar a entrenar en forma constante si quería yo dar golpe en esto de la caminata, así que empecé a caminar……
Como en la caminata va a haber puestos de agua, decidí simular esos puestos dejando el agua en mi camioneta, así que hice las mediciones pertinentes y descubrí de donde a donde era una milla, y de donde a donde eran dos millas, así que después de 2.6 millas (donde se supone está el primer puesto de agua) regresaba a mi camioneta y cambiaba de botella de agua, y la verdad es que la simulación me quedó bastante bien, claro, hasta que llegue al tema de los baños, y ahí ya no era tan fácil, pero bueno, aquí en Coatzacoalcos sudo y eso resuelve el problema jejejeje.
Como aquí en Coatzacoalcos hace mucho calor empecé a caminar en las tardes, a partir de las 6:30 o 7 de la noche, y descubrí que la ciclopista era un buen lugar para empezar a caminar.
Ese inicio fue fantástico, porque el malecón en las tardes es fabuloso, sobre todo por los atardeceres de mi ciudad, siempre me han encantado pero ahora me fascinan, es maravilloso ver los atardeceres a la orilla del mar, y desde la ciclopista como que se acerca más al mar y se ven increíbles. Ya sé, cuando digo ciclopista todo el mundo espera una bicicleta, pero no, ahí camina mucha gente porque el cemento es fabuloso para caminar, por supuesto a los ciclistas no les debe gustar mucho que haya tanto peatón en su pista pero bueno, espero nos tengan paciencia.
Después de varios días caminando, ya empecé a hacer las pruebas de 2 y 3 horas caminando, y descubrí que no es lo mismo la primera hora que la tercera, como que uno se va cansando.
Es impresionante como hay gente que te saluda, con la que sonríes y quien de plano no te pela cuando te cruzas con ellos al momento de caminar, hay los que llevan todo el atuendo deportista y a los que les dijeron que tienen que caminar y con trabajo y traen tenis, sino es que con sandalias, hay los que van con sus hijos y llevan el triciclo, la bici con rueditas y la patineta, quien va noviando tomando un helado y quien entrena para un maratón. Algunos corren y otros caminan, pero en las tardes muchos pasean y disfrutan, es bueno ver a mis paisanos disfrutar tanto de nuestra ciudad como lo hago yo, el malecón es una delicia y los atardeceres un regalo.
Pero bueno, después de un rato de disfrutar me dí cuenta que la caminata es en las mañanas, así que tenía que entrenar de madrugada, y nunca he sido muy buena para esto de las levantadas temprano, pero ni modo, ya estaba yo embarcada en esto.
Empecé a caminar a las 7 de la mañana, lo mejor es caminar de 7 a 9, porque ya a las 9 el calor empieza a ser insoportable.
Decidí hacer la caminata de dos días para empezar a poner a prueba mi resistencia, el primer día, un sábado, caminé 12 kilómetros, y el sol me estaba acabando, porque ya para las 9.30 era mucho, el segundo día hice 16 kilómetros, y ese domingo estuvo nublado, lo cual fue fabuloso porque me duró las 3 horas.
Sí podía, sé que sí podía, así que decidí hacer la prueba de 14 kilómetros un sábado y 16 el domingo, pude hacerlo, me llevó un buen rato pero pude hacerlo.
Y finalmente decidí hacer la de 18 kilómetros el sábado pasado y 19 kilómetros el domingo. Ya sé, para un maratonista esto no es nada, y más de uno me ha dicho que debo hacerla completa, pero esta caminata es para no deportistas como yo, donde no tienes que hacerla completa porque sabes que te puedes agotar en el intento, y para agotarte es mejor hacerlo el día de la caminata real.
Así que decidí despertarme temprano para entrenar… como entreno solita descubrí que antes de las 6.15 no hay mucha gente porque es todavía de noche, así que me esperé hasta que empezaba a amanecer, y a caminar, es fabuloso llegar hasta las escolleras, ver el amanecer, sentir la brisa fresca de las mañanas, ver que hay una jauría de gatos en las escolleras que yo nunca había visto, que supongo que buscan los restos de pescado que sacan los pescadores al limpiar la pesca del día, ví a los delfines al pararme al lado del faro, y los vi porque otro caminador tuvo a bien enseñármelos, disfruté esa primera hora de mi caminata gratamente.
Es increíble como cambian los paisajes y la gente con cada hora que pasa, de 6 a 7 están los que disfrutan los amaneceres y los de mayor edad que ya no duermen después de las 5 de la mañana, de 7 a 8 están los deportistas, de 8 a 9 hay deportistas y borrachos, se preguntarán porque borrachos, porque son los que deciden ir al malecón a seguirle, si alguna vez lo han hecho y han sido de los que han dicho, “no se preocupen, yo hablo con el poli y arreglo todo” pensando que todos nos ven sobrios, créanme que no, el alcohol se nota a kilómetros de distancia, y eso que yo estaba más lejos que los polis…..
De 8.30 a 10 están las familias, llegan con los niños a andar en bicicleta, triciclo y patineta, y de 10 a 11 uno que otro flojillo que no quiere caminar pero no tiene de otra porque el doctor se lo recetó.
Y en todo este tiempo yo seguía caminando, es divertido verlo, es como si estuviéramos viendo una película de esas que van pasando las escenas como en un carrusel.
El domingo me llovió y tuve que decidir que no tenía otra opción que caminar bajo la lluvia, porque voy a caminar en San Francisco y en esa ciudad…llueve!!!! Así que hice la prueba y vi que perfectamente puedo caminar bajo la lluvia con el rompevientos y sin problema J.
Así que ya estoy lista para caminar, me voy a San Francisco este miércoles porque llegar está un poco complicado entre vuelos y horarios y quiero descansar y disfrutar San Francisco jueves y viernes y estar lista para caminar el sábado, ya este sábado que viene es la caminata, como dicen no hay tiempo que no llegue ni plazo que no se cumpla.
Para los que han donado mil gracias, realmente he tenido unos regalos maravillosos, para los que no y no vayan a hacerlo, no se preocupen, solo lean los diarios y disfrútenlos porque solo con su intención de estar conmigo es suficiente, para los que sí quieren donar y todavía no lo han hecho, les pido que lo hagan entre el lunes y martes, porque tengo que hacer el corte para el martes en la noche.
Recuerden, pueden donar directamente en la página de avonwalk.org o enviando el dinero a mi cuenta de banco y yo lo hago por ustedes,
Les doy a todos las gracias y pronto les mandaré la tercera parte de este diario, que incluirá por supuesto… la caminata.
Gracias a todos, muchos abrazos y bendiciones
Paz para todos
Tais

DIARIO DE UNA CAMINATA 1

DIARIO DE UNA CAMINATA… PRIMERA PARTE

De pronto me di cuenta que en dos meses iba a cumplir 40 años, como diría Ricardo Arjona, voy a ser una Señora de las 4 décadas!!!, como supongo que les pasó a mis padres y a mis abuelos pensé –pero si apenas acabo de cumplir los 25- hasta que recordé todo lo que he hecho y vivido en estas 4 décadas y me dí cuenta que he tenido una vida feliz, llena de aventuras, viajes y grandes amigos, con una familia maravillosa a la cual quiero muchísimo, y llena de experiencias que me han hecho ser quien soy ahora, alguien que me cae muy bien, o sea, mi misma, me da gusto que seas quien eres.
Así que cumplo 40, y ¿Qué voy a hacer ahora? Hubo quien me dijo que porqué no me iba de viaje, o que hiciera una gran fiesta, pero la verdad quería algo más, algo que implicara un gran logro…. Durante varios años he leído la revista de Yoga Journal y la de Oprah, y la publicidad de la Caminata de la Fundación Avon aparecía constantemente, lo cual me hizo pensar… durante muchos años he pensado que no puedo hacer mucho ejercicio porque me desmayo y lo pongo como un pretexto maravilloso para decir no a muchas cosas –es que las hormonas….- y la verdad es que nuestro cuerpo responde a lo que nosotros nos enfoquemos y puedo caminar.
Después de buscar diferentes opciones en México y en Estados Unidos (por su relativa cercanía a nuestro país), buscando opciones cercanas a la fecha de mi cumpleaños (14 de Julio) encontré esta caminata, no fue mi primera opción, primero por la cantidad de kilómetros que hay que caminar (21 kilómetros el sábado 11 de julio y 21 kilómetros el domingo 12 de julio), y además, por si esto fuera poco, había que recaudar $1,800 dólares!!!!!!, y yo nunca me consideré muy buena para pedir donativos.
Sin embargo empecé a leer sobre la Caminata de la Fundación Avon, y lo primero que me llamó la atención es que no es una caminata de competencia, no hay primer lugar, o segundo o tercero, es una caminata cuyo lema es “IN IT TO END IT” (En ella para terminarla), y de eso se trata, de ponerte el reto personal de terminarla. La caminata puede ser de 21 kms el sábado y 21 kms el domingo, o la completa que es de 42 kms el sábado y 21 kms el domingo, o sea maratón y medio en total, lo cual para mí era mucho, la neta.
Poco a poco empecé a leer de sobrevivientes de cáncer de seno y de otros tipos de cáncer que hacen esta caminata, para demostrarse que siguen en la vida, de gente que hace la caminata como tributo a alguien y de gente como yo, que lo hacemos por sentirnos bien con nosotros mismos.
No es una caminata que lleve un tiempo, tienes un tiempo en el cual hay que llegar, pero no es el más rápido, sino que te motivan inclusive a ver el paisaje de San Francisco y a tomar fotos, hay puestos de agua y puestos con comida y atención médica, incluso hay una parada para comer lunch. Como pueden ver, esta caminata es de resistencia, y de lograrlo.
Así que decidí que la caminata se me antojaba, y que tenía que empezar a entrenar para ello, y que tenía que….. recabar $1,800 dólares, y ahí si no sabía por donde empezar. Decidí no poner yo el dinero porque tenía que considerar que iba a pagar el avión a San Francisco y la estancia, así que tenía que encontrar la forma de encontrar donadores, y….. me atreví a escribirles!!!!, no fue fácil, porque nunca lo había hecho, sin embargo, descubrí que no es tan difícil como me imaginé, y me atreví porque no pierdo nada con hacerlo. He recibido respuestas increíbles, he contactado con gente con la que hacía años no contactaba, he recibido donativos de personas que nunca me esperé, y a todos y a cada uno de ustedes que ha donado, mil gracias, porque han hecho que no me sienta mal por solicitar un donativo, sino me han hecho ver que como dicen –pide y se te dará-, no sabemos cómo ni por donde, simplemente llega lo que necesitamos.
Ya llevo casi $1000 dólares, ya solo faltan $800 más, te pido si todavía no has donado y has pensado hacerlo que lo hagas pronto, sería una gran ayuda para mí.
No es fácil pedir donativos, pero es de las cosas que puedo empezar a cambiar en mi, digo, no todos los días se cumplen 40.
Pronto les escribiré para platicarles la siguiente parte de este…DIARIO DE UNA CAMINATA.
Si deseas donar recuerda que puedes hacerlo en la página de www.avonwalk.org o a mis cuentas bancarias y yo hago la donación en tu nombre.
Un gran abrazo a todos
Tais

SER INVISIBLE

El otro día llegué muy temprano al aeropuerto de México y como no tenía mucho que hacer, decidí darme un masaje de los que hay en la sala B, independientemente de la nota que voy a dar cabe mencionar que los masajes ahí son deliciosos, caros, pero deliciosos, claro, debe gustarte el shiat-su y además que te guste que te den masajes fuertes…


Llegando al local me atendió una muchacha chinita, la cual en su medio español me explicó los paquetes y los masajes. Lo que me llamó mucho la atención es que la muchacha, al hablar mandarín y suponer que yo no lo hablaba (lo cual es cierto, no lo hablo, pero…. Y si lo hablara?) empezó a platicar con su amiga mientras me daba el masaje, para ella, al suponer que yo no entendía el mandarín, supuso que tampoco la escuchaba, que era invisible, porque ya no formaba parte de su mundo en ese momento.


Eso nos sucede, que por hablar otro idioma ya no formamos parte del mundo de los que nos rodean. Recuerdo que hace algunos años (varios pero no diremos cuantos jejejeje), andaba yo en Grecia con mi abuela, y mientras estábamos sentadas en alguno de los tantos parques con una iglesia ortodoxa frente a nosotras salió un sacerdote de la iglesia y se sentó en una banca cerca de nosotras. Mi abue me empezó a decir que si ya había visto al señor, con su larga barba y su sombrero característico de los ortodoxos, y le dije –abue, nos va a oír- a lo que ella me contestó que no nos entendía, suponiendo ella que al no entendernos éramos invisibles para ese señor, claro, cuál fue nuestra sorpresa que en el momento de levantarnos, en medio de ese parque en Atenas, el sacerdote ortodoxo sentado a nuestro lado amablemente nos dijo –Que tengan muy buena tarde- ¡en español!, así es, en español, así que no fuimos invisibles para él.


A veces creemos que la gente no nos ve, o bien que no nos escucha, sin embargo nos ve y nos escucha más de lo que creemos, para mí quien más siente que es invisible es aquella persona que está hablando por celular o por nextel y cree que nadie lo escucha, cuando está en un camión encerrado durante tres horas con 20 personas más…. Hace poco me tocó atrás de mi un señor que hablaba a todo volumen de PEMEX y de Coatzacoalcos, suponiendo que como íbamos de Querétaro a México no había nadie que supiera de qué estaba hablando, cuando yo soy originaria de Coatzacoalcos, así que no era invisible….


No somos invisibles, mucha gente nos ve y mucha gente nos escucha, las personas a las que entreno en Servicio al Cliente creen que nadie los ve porque son el mesero, el de mantenimiento o el de áreas públicas, sin embargo se nos olvida que no somos invisibles, somos personas que hacemos contacto con los que nos rodean, y como diría la maestra Margarita cuando estaba en prepa “300 pares de ojos los observan” (esto era para evitar que nos fueramos de clinch con el novio jejejeje), pero es real, mucho más gente de la que suponemos nos observa, no somos invisibles, existimos en el mundo y para los que nos rodean.


Así que aunque yo no sabía mandarín, igual y hubiera sabido y hubiera cachado a la muchacha chinita hablando mal de mí y ella no lo hubiera notado, uno nunca sabe, este mundo global nos da la pauta de la visibilidad.


Paz a todos y que tengan una excelente semana.

Tais

miércoles, 11 de agosto de 2010

INICIO

Hola a todos, despues de escribir los Diarios de una Caminata, varias personas me han escrito solicitandome que siga haciéndolo, así que aprovecharé lo que fue una columna en un periódico que escribi hace unos 10 años para seguir con ello...
El Mundo y su Gente es una columna que habla de gente, porque? porque me encanta, filosofo sobre ella y su relación conmigo, de lo que veo alrededor y las experiencias vividas por mí, de lo que me platica gente alrededor del mundo y que gracias a la memoria que tengo recuerdo y plasmo a veces en papel.
Escribiré todos los jueves y les enviaré una liga, si desean enviar la liga a alguien más con gusto háganlo.
Espero sus comentarios y sus opiniones.
Saludos y estamos en contacto
Tais